domingo, 8 de diciembre de 2013

Un religioso español asegura que hay una matanza en Bangui, en República Centroafricana

EFE. 06.12.2013 - 17:50h El religioso español Juan José Aguirre, obispo de la ciudad de Bangasú, en República Centroafricana, dijo este viernes telefónicamente a que los rebeldes de Séléka están "ajusticiando" a milicianos "Anti Balaka" en Bangui, donde asegura que se está produciendo una "mantanza indiscriminada". El clérigo se encuentra refugiado junto a otras 3.000 personas en una parroquia de la capital, ciudad a la que acudió a principios de esta semana para acompañar a un grupo de periodistas españoles hasta el aeropuerto. Este viernes se disponía a regresar en coche a su diócesis, pero los bombardeos y los intensos tiroteos que se produjeron por los combates entre las milicias y las fuerzas de seguridad le hicieron buscar refugio en una vivienda, desde la que más tarde pudo trasladarse hasta la parroquia. Los Séléka salen a la calle buscando a los Anti BalakaSegún el Gobierno de transición la República Centroafricana, los tiroteos y la tensión cesaron durante la tarde del jueves, pero Aguirre observa otra situación muy distinta desde su refugio. "La situación está igual de tensa. Los Séléka -de confesión musulmana- están aprovechando ahora para salir a la calle a buscar a los "Anti Balaka" -cristianos partidarios del derrocado presidente François Bozizé- y asesinarlos", aseguró. "Están matando a con machetes y pistolas a jóvenes, y a veces incluso sin saber si realmente son miembros "Anti Balaka". Está habiendo una matanza indiscriminada, es realmente duro", lamentó. La coalición Séléka, que fue la que consiguió derrocar a Bozizé y que apoya al actual presidente, Michel Djotodia, "está actuando con impunidad", afirmó. Las tropas francesas no han entrado en los barrios El obispo asegura que las tropas francesas, cuya intervención ha sido autorizada por la ONU, han ocupado posiciones en lugares estratégicos de la ciudad, si bien "aún no han entrado en los barrios, que es donde se está viviendo el verdadero drama". Aguirre confía en que la presencia del ejército galo consiga calmar la situación en la capital centroafricana y que pronto se pueda restaurar el orden. Dos millones de niños, víctimas de la violencia y el reclutamiento forzoso Por otro lado, más de 2 millones de niños se han convertido en víctimas de la violencia y el reclutamiento forzoso un año después del inicio de la crisis en la República Centroafricana (RC), informó este viernes el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). Naciones Unidas reclamó, a través de un comunicado, una acción urgente para proteger a los menores que se han visto envueltos en las atrocidades de los últimos días, que solo este jueves dejaron 130 muertos en los combates entre milicias y las fuerzas de seguridad en Bangui. La escalada de los enfrentamientos entre partidarios de Séléka, musulmanes, y la milicias de autodefensa católicas "Anti-Balaka" ("antimachete" en sango, la lengua nacional) hace temer que los choques degeneren en grandes masacres en Bangui y otras ciudades. Alerta de la ONU De hecho, la ONU ya ha alertado de que una nueva ola de desplazamientos es cada vez más probable en la República Centroafricana, donde se están produciendo los enfrentamientos armados más graves en ocho meses entre partidarios y detractores del presidente, Michel Djotodia, así como actos de revancha y ataques sectarios, según la ONU. Aunque es "muy pronto" para ofrecer una evaluación de la situación, la Oficina de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas consideró que "es posible un aumento del desplazamiento". En Bangui murieron este jueves un centenar de personasAdemás, esta crisis ha provocado la huida de 68.000 personas a otros países de la región en un año. Por su parte, la oficina de la Alta Comisaría de la ONU para los Derechos Humanos expresó su preocupación por la situación en la capital de la República Centroafricana, Bangui, y la ciudad de Bossangoa (350 kilómetros al norte), donde este jueves se informó de la muerte de más de un centenar de personas, incluidos al menos siete niños.