Las valoraciones que ha utilizado la Comisión Europea para calcular las
ayudas públicas a la banca española estiman unos descuentos muy
inferiores a los utilizados para fijar los precios de transferencia al
'banco malo' (Sareb). Si la media era del 50% para todos los activos
traspasados en el diseño del vehículo, Bruselas estima que para llegar a
precios de mercado este porcentaje debería irse hasta el 72%.
Extrapolando las proporciones de crédito promotor y de inmuebles
adjudicados del balance de Sareb, se puede estimar que para estos
últimos el recorte alcanza en torno al 85%, y concretamente el 75% en el
caso de los pisos terminados.
Así se
desprende de las cantidades estimadas por la Comisión en concepto de
ayudas públicas, hasta llegar a un total de 67.000 millones. El Confidencial informó la semana pasada de que la diferencia entre esos 67.000 y el dinero que van a recibir efectivamente los bancos se debe a que los descuentos aplicados por el 'banco malo' son superiores a los que Bruselas considera de mercado; y cualquier cantidad entregada por encima de precios de mercado se considera ayuda de Estado, según la normativa comunitaria.
En concreto, hay 18.000 millones de ayudas públicas atribuibles a esta diferencia
entre los descuentos de mercado y los de Sareb, una vez restados de los
67.000 millones los 37.000 otorgados por Europa a las cuatro entidades
nacionalizadas -BFA-Bankia, CatalunyaCaixa, NovaGalicia y Banco
Valencia- y los 12.000 que les ha inyectado hasta ahora el FROB.
Contando con que el descuento medio aplicado por la Sareb es del 50% y
con que se han traspasado 40.695 millones netos por estas cuatro
entidades, se puede calcular que el descuento implícito en las ayudas de
Estado calculadas por Bruselas es del 72%.
Teniendo
en cuenta el porcentaje de activos que suponen el crédito promotor
(34.900 millones netos tras los descuentos del traspaso a Sareb,
incluyendo sano y moroso) y los inmuebles adjudicados (9.500 millones),
los cálculos realizados por varios expertos concluyen que los descuentos
implícitos en la valoración de Bruselas llegan al 67%-68% en el primer
caso y hasta el 85% en el segundo. Si aplicamos el desglose por tipos de
activos, estos cálculos estiman que los descuentos utilizados por la
Comisión serían del 95% para el suelo, del 90% para las promociones en construcción y del 75% para el producto acabado.
Según las fuentes consultadas, la referencia que ha tomado Bruselas son precios "de liquidación",
es decir, lo que se podría obtener si hubiera que vender todos estos
activos de golpe ahora mismo, en vez de durante 15 años como prevé el
plan de negocio del 'banco malo'. Esos precios de derribo "no tienen
sentido", según estas fuentes, ya que no se van a materializar y, por
tanto, no reflejan realmente el mercado.
"El valor de mercado que toma Bruselas para este ejercicio tiene que ser inferior al valor adoptado por Sareb;
de lo contrario, las entidades venderían los activos en mercado en vez
de traspasarlos. Pero no ha tomado un valor real de mercado, sino de una
situación de crisis en la que se inunda el mercado vendiendo todos los
activos a la vez", explican fuentes del Banco de España.
Descuentos teóricos
Por tanto, estas ayudas de Estado no son más que un mero apunte contable, son ayudas teóricas o ficticias porque
no se van a entregar realmente a las entidades, sino que proceden del
ejercicio de valoración citado. Por ello, no tienen impacto en el
déficit ni en la deuda públicos. El importe efectivo de las ayudas es el
del rescate más las inyecciones del FROB, pero esta actitud de la
Comisión ha sembrado la inquietud en todo el sector financiero español
porque se suponía que los descuentos del banco malo estaban pactados con
la troika.
El grueso del desfase entre las ayudas reales y las calculadas por la Comisión corresponde a BFA-Bankia, para la que Bruselas calcula ayudas por 36.000 millones, cuando
esta entidad va a recibir 22.424 (los 17.959 del rescate europeo más
los 4.465 que recibió del FROB 1 en forma de préstamo y que se
convirtieron en capital con su nacionalización en mayo). Para
CatalunyaCaixa, el cálculo es de 14.000 millones, frente a los 12.052
efectivamente percibidos (9.084 del rescate más 1.250 del FROB 1 y 1.718
del FROB 2 en forma de capital, de ahí que sea pública). En el caso de
Novagalicia, el comisario europeo Joaquín Almunia calcula 10.000
millones en ayudas, cuando recibirá 9.052 (5.425 de Europa más 1.162 del
FROB 1 más 2.465 del FROB 2). En el caso de Banco Valencia, la
estimación europea es de 7.000 millones, y las ayudas reales de 5.500
(4.500 del rescate y 1.000 del FROB cuando fue intervenida).