Cuánto vale de verdad Bankia? ¿Su capitalización bursátil es la adecuada o es excesiva pese al desplome del 81% en el año? Eso es lo que quiere saber el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para establecer la tasación exacta
que servirá de medida para el canje de las preferentes y la inyección
de capital público. Ese trabajo de vital importancia ha sido encargado a
Citi, Nomura y a BDO.
El Ministerio de Economía
ha contratado al banco estadounidense, a la entidad japonesa y a la
auditora para que en un tiempo récord le digan qué valen los recursos
propios de Bankia para saber con qué proporción del grupo se quedará el
Estado cuando le aporte los 24.000 millones del rescate aprobado el pasado 28 de noviembre. Aunque se da por supuesto que la participación pública será superior al 90%, calcular el porcentaje exacto es fundamental ya que su posterior venta servirá para devolver el dinero a la Unión Europea.
El encargo solicitado por el FROB a Citi, Nomura y BDO no es solo para saber qué vale Bankia, sino también el Banco Financiero y de Ahorro (BFA). El holding
fue la cabecera cuyos activos se excluyeron el pasado año cuando la
entidad, presidida por aquel entonces por Rodrigo Rato, salió a bolsa.
En esa sociedad se agruparon las principales inversiones financieras,
como Iberdrola o Mapfre, así como la participación de control en el City National of Florida. Ahora, todo tendrá que ser vendido por orden de Bruselas.
Pero
si para el Estado es esencial conocer cuánto vale el negocio bancario
de la extinta Caja Madrid y Bancaja, también lo es para los titulares de
las participaciones preferentes, de la deuda subordinada y de la
perpetua, productos conocidos como híbridos. Según se ha acordado con la
Unión Europea, a esos clientes se les aplicará un descuento sobre el
valor inicial de su inversión que oscila entre el 39% para los que compraron las preferentes, el 46% de la deuda subordinada perpetua y del 14% del resto de emisiones con vencimiento.
A
todos estos afectados se les va a ofrecer el canje obligatorio de sus
títulos por acciones de Bankia, por lo que para ellos será trascendente
saber en cuánto se tasa el banco cotizado. En función de los cálculos
que hagan Citi y Nomura, recibirán más o menos acciones a cambio de sus
deterioradas inversiones en deuda.
Caída insuficiente
Aunque
Bankia se ha desplomado este año un 81% hasta caer hasta los 0,67 euros
por título, fuentes financieras dan por hecho que su valor es realmente
inferior. La entidad presidida ahora por José Ignacio Goirigolzarri
capitaliza 1.345 millones de euros, muy lejos de los 12.000 millones en
lo que se estimó cuando salió a bolsa en julio de 2011. Por tanto, si
los bancos contratados por el FROB resuelven que Bankia aún vale menos,
los preferentistas y los titulares del resto de la deuda percibirán acciones por un precio más bajo.
El test de estrés elaborado por Oliver Wyman determinó que las necesidades de capital del grupo BFA en un escenario adverso son de 24.700 millones de euros,
unas previsiones que se ven aminoradas por la transferencia de activos
al 'banco malo' -que reduce en 200 millones el déficit de recursos
propios- y el canje de híbridos.
La entidad señala que, de este
modo, las necesidades de inyección de dinero público de BFA-Bankia
estarían en 17.959 millones de euros. Después de que el FROB realizara
un anticipo de 4.500 millones, la aportación pendiente de realizar por
fondos públicos es de 13.459 millones de euros.
Todas estas
operaciones supondrán una enorme dilución para todos los inversores de
Bankia, tanto para los accionistas del banco cotizado como para los
inversores de deuda. No obstante, les quedará la esperanza de que se
cumplan las previsiones de Goirigolzarri, quien estima que la
institución financiera volverá a ganar dinero el próximo año. Más aún,
confía en obtener un beneficio de 1.200 millones en 2015, ejercicio en el que volvería a pagar dividendos.