El clima de máxima incertidumbre y de aversión al riesgo provoca que por primera vez Alemania haya emitido deuda con una rentabilidad negativa. En concreto, ha colocado 3.900 millones de euros de letras a seis meses a un interés medio del -0,012%. Los inversores están dispuestos a perder una pequeña parte de su dinero a cambio del 'refugio' que ofrece la deuda alemana.
Desde el estallido de la crisis financiera la deuda alemana, en el mercado secundario, ha cotizado en varias ocasiones con rentabilidades negativas. Pero nunca hasta ahora, según la propia agencia alemana, la mayor economía de la eurozona había colocado deuda en el mercado primario a un interés negativo