viernes, 28 de octubre de 2011

ESPAÑA

El mercado laboral español ha vuelto a encender todas las alarmas. En el tercer trimestre se bordearon los cinco millones de parados, cuando solo los más pesimistas entre los expertos creían que esa cifra podría alcanzarse, pero en ningún caso ya. Los nefastos datos, con otro máximo histórico de desempleo (4.978.300 personas) y la mayor tasa de paro en la crisis (21,5%) ha cogido a contrapié a los analistas y al propio Ministerio de Trabajo, que confiaban en un mínimo aumento de la ocupación, de la mano de la temporada estival.