El consejero delegado de la consultora británica Strategy Economics,Matthew Lynn, asegura en un artículo publicado en The Wall Street Journalque es "mucho más probable" que España salga del euro antes que Grecia o cualquier otro país periférico, y apunta que a la economía española le podría ir mejor fuera de la moneda única. "España es demasiado grande para rescatarla, no tiene complejos políticos sobre romper relaciones con la Unión Europea, los españoles están ya hartos de la austeridad y existe un mundo hispano parlante mucho más grande para que pueda crecer", explica Lynn, quien cree que existen "pocas buenas razones" para que permanezca en el euro y "pocas señales" de que tiene la voluntad de soportar los sacrificios que la divisa les demandará.
El analista señala que, incluso con las elecciones griegas, España se ha convertido en el centro de la crisis de la eurozona y es probable que lo siga siendo el resto del verano, ya que su economía "se tambalea de mal en peor", ha entrado en recesión y es probable que siga contrayéndose. Además,incide en que el desempleo alcanza el 24%, la prima de riesgo está en niveles récord y el sistema bancario se tambalea al borde del abismo."Bankia ya ha tenido que ser rescatada y hay temores de que otros puedan estar en un situación igual de mala", señala.
En este escenario, señala que la receta de Bruselas y Berlín para España es exactamente la misma que para el resto de países del euro con problemas, soportar una profunda recesión, dejar que el paro suba y permitir que los salarios caigan hasta recuperar parte de la competitividad. Así, destaca que en Grecia, al igual que en Irlanda, Portugal e Italia, han soportado esto, mientras que cree que España no lo hará por "seis razones".
La primera es que, a diferencia de Grecia, es demasiado grande para ser rescatada y, si la economía se colapsa, tendrá que hacer todos los esfuerzos por si misma.
En segundo lugar, señala que España está cansada de austeridad y recuerda que las protestas contra los recortes empezaron hace un año con los "indignados" en España y luego se extendieron a otros países. "La austeridad apenas ha comenzado y ya ha provocado una fuerte oposición. El país se enfrenta a muchos años duros en la eurozona y hay pocas señales de que este preparado para ello", incide.
La tercera razón es que España tiene una "economía real" y "exitosa" con una base industrial "perfectamente respetable" y con un ratio de exportaciones similar al de Reino Unido, Francia o Italia. En su opinión, el problema de España fue una moneda "desquiciada" que creó una "demencial burbuja inmobiliaria con consecuencias calamitosas", por lo que no hay razones para creer que no tenga un "prospero futuro fuera del euro".
En cuarto lugar, señala que España es un país "políticamente seguro",que a diferencia de muchos otros países está en el euro por razones económicas y no políticas. Por ello, cree que puede abandonar la moneda única y la UE dependiendo de si funciona o no, "y justo ahora está claro que no funciona".
Respecto a la quinta razón, apunta que España tiene horizontes más grandes, ya que se parece en parte a Europa y mucho a las "pujantes economías" hispano parlantes de América Latina y al enorme mercado hispano de Estados Unidos. "¿Por qué atarse a un proyecto fallido cuando existen oportunidades mucho mayores fuera?", se pregunta.
Por último, incide en que existe una discusión seria en España sobre el futuro de la divisa y muchos economistas y expertos argumentan que el problema es el euro y que el país solo se recuperará si vuelve a la peseta. "El tabú se ha roto", remarca. "Por todas estas razones, España es la nación que dentro de la moneda única podría concluir primero que una salida negociada del euro es un paso lógico", concluye.
Por otro lado, Lynn remarca que la crisis de deuda de la eurozona, como cualquier evento geoeconómico espectacular, está generando su propio vocabulario con palabras como Merkozy, que hacía referencia a Angela Merkel y Nicolas Sarkozy, o Grexit, para referirse a la posible salida de Grecia del euro. A este respecto, apunta que ahora surge una nueva expresión de la unión de las palabras Spain y Exit, Spexit. "Es un abreviatura sobre España y su salida del euro, y vamos a escucharla mucho más en lo que promete ser un verano turbulento", añade.
En segundo lugar, señala que España está cansada de austeridad y recuerda que las protestas contra los recortes empezaron hace un año con los "indignados" en España y luego se extendieron a otros países. "La austeridad apenas ha comenzado y ya ha provocado una fuerte oposición. El país se enfrenta a muchos años duros en la eurozona y hay pocas señales de que este preparado para ello", incide.
La tercera razón es que España tiene una "economía real" y "exitosa" con una base industrial "perfectamente respetable" y con un ratio de exportaciones similar al de Reino Unido, Francia o Italia. En su opinión, el problema de España fue una moneda "desquiciada" que creó una "demencial burbuja inmobiliaria con consecuencias calamitosas", por lo que no hay razones para creer que no tenga un "prospero futuro fuera del euro".
En cuarto lugar, señala que España es un país "políticamente seguro",que a diferencia de muchos otros países está en el euro por razones económicas y no políticas. Por ello, cree que puede abandonar la moneda única y la UE dependiendo de si funciona o no, "y justo ahora está claro que no funciona".
Respecto a la quinta razón, apunta que España tiene horizontes más grandes, ya que se parece en parte a Europa y mucho a las "pujantes economías" hispano parlantes de América Latina y al enorme mercado hispano de Estados Unidos. "¿Por qué atarse a un proyecto fallido cuando existen oportunidades mucho mayores fuera?", se pregunta.
Por último, incide en que existe una discusión seria en España sobre el futuro de la divisa y muchos economistas y expertos argumentan que el problema es el euro y que el país solo se recuperará si vuelve a la peseta. "El tabú se ha roto", remarca. "Por todas estas razones, España es la nación que dentro de la moneda única podría concluir primero que una salida negociada del euro es un paso lógico", concluye.
Por otro lado, Lynn remarca que la crisis de deuda de la eurozona, como cualquier evento geoeconómico espectacular, está generando su propio vocabulario con palabras como Merkozy, que hacía referencia a Angela Merkel y Nicolas Sarkozy, o Grexit, para referirse a la posible salida de Grecia del euro. A este respecto, apunta que ahora surge una nueva expresión de la unión de las palabras Spain y Exit, Spexit. "Es un abreviatura sobre España y su salida del euro, y vamos a escucharla mucho más en lo que promete ser un verano turbulento", añade.